Esta es una herramienta maravillosa para aplicar cuando estamos abrumados por la situación actual, cuando nos molestan pequeños detalles, cuando no podemos dormir pensando en un problema.
Esta herramienta la aprendí de Neale Donald Walsh, autor de Conversaciones con Dios. Se trata de tomar perspectiva. Pregúntate con honestidad: ¿qué tan importante va a ser este asunto dentro de un año? ¿Vas a sobrevivir? Si aún estarás vivo en un año, no es tan grave, y si no vas a estar vivo… es incluso menos importante.
Mirar las cosas desde una perspectiva más amplia nos permite valorarlas de manera diferente. Y entre más amplia sea la perspectiva, menor importancia tendrán los detalles y los dramas. Puedes, incluso, hacer el ejercicio de mirar más allá de tu vida, y darte cuenta de que, tal vez, las cosas no son tan serias y graves como parecen.
¿Qué tan importante será esto en 10 años? ¿En 50 años? ¿En 500 años? ¿En 6000 millones de años, cuando nuestro sol ya habrá desaparecido? ¿Es tan grave, tan fundamental? ¿Es obligatorio perder tu paz por eso?
Suscríbete a nuestro boletín y recibe nuestras reflexiones en tu correo.